El malestar estomacal o indigestión es una condición muy frecuente. Generalmente la persona experimenta dolor o malestar en el área superior del abdomen. La indigestión puede tener diferentes causas, como comer demasiado, comer muy rápido y no masticar adecuadamente, estar bajo estrés o padecer ciertas condiciones médicas como la gastritis o la acidez estomacal.
El estómago produce un ácido que ayuda a digerir los alimentos que comemos, pero la producción elevada de ácido estomacal conduce a una sensación de ardor y dolor en el estómago. Es aquí donde el bicarbonato de sodio nos muestra su mejor beneficio, ya que su naturaleza alcalina (valor de pH elevado) ayuda a neutralizar dicha acidez.
A continuación te explicamos cómo y cuándo puedes utilizarlo desde la comodidad de tu casa.
Malestar estomacal, eructos, gases e indigestión
El bicarbonato de sodio se disuelve fácilmente en el agua y el intestino es capaz de absorberlo muy bien. Disuelve 1 cucharadita de bicarbonato en medio vaso de agua, revuelve y bebe esta solución cada 4 horas, o con menos frecuencia según la gravedad.
Otra variante puede ser disolver 1 cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso de agua tibia, agregando 1 cucharadita de jugo de limón. Bebe la mezcla, repitiendo cada 3-4 horas si el malestar persiste. (Te puede interesar: 8 beneficios para la salud que aporta el agua con limón)
El vinagre también puede convertirse en un gran aliado para el bicarbonato. En medio vaso de agua agrega media cucharadita de bicarbonato de sodio y una cucharadita de vinagre. Puedes utilizar vinagre de manzana o vinagre regular. Una vez que la mezcla comience a producir burbujas, debes beberla. Si no está burbujeando, agrega un poco más de bicarbonato de sodio y vinagre.
Dolor de estómago
El malestar estomacal y el reflujo ácido pueden provocar dolor en la parte superior del abdomen. El bicarbonato de sodio disuelto en diferentes concentraciones reduce ese dolor, al neutralizar el exceso de ácido estomacal.
Cuando el dolor de estómago es leve, basta con añadir 1 cucharadita de bicarbonato a un vaso de agua bien fría. La dosis no debe ser más de 5 cucharaditas por día. En caso de tener un dolor fuerte, se puede aumentar la concentración de bicarbonato de sodio a dos cucharaditas por vaso de agua.
Ahora bien, es necesario no exceder la dosis de bicarbonato recomendada para aliviar el malestar estomacal. De forma general los adultos pueden tomar de media a una cucharadita de bicarbonato de sodio cada 3-4 horas, mientras que los niños mayores de 6 años pueden tomar de un cuarto a media cucharadita. Su uso no se recomienda en niños menores de 6 años.
Recuerda siempre que antes de utilizar cualquier remedio casero es necesario valorar si se están tomando medicamentos, si se padece alguna enfermedad o si contradicen las indicaciones del médico.
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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: mayo 27, 2019.