No hay fruta más romántica y cómplice de momentos íntimos que la fresa. Y el pensar en modificar tu rutina amorosa por la diabetes, pudiera significar una molestia en tu vida de pareja o simplemente una privación por desconocimiento. Así que, si te han diagnosticado diabetes, de seguro te preguntarás ¿pueden los diabéticos comer fresas? Pues, en esta entrada profundizaremos un poco sobre este tema.
Soy diabético, ¿Podré comer fresas?
Tranquilo, si es posible consumir las fresas a pesar de la diabetes, ya que esta condición no es el fin de todo. Se puede degustar de las fresas sin remordimientos. Y lo que es más, puede ser recomendable para controlar los niveles de glicemia. Más; 50+ Remedios Caseros Naturales para la Diabetes.
¿Las fresas aumentan el nivel de azúcar en la sangre?
No necesariamente, tanto su índice glucémico como sucarga glucémica es baja. Además, son muy pocas las calorías que contiene la fresa y el nivel de saciedad que deja es considerablemente bueno. Gracias a ello, incide de forma positiva en tu organismo, ya que te facilitará tener una dieta sana.
Las fresas contribuyen con tus riñones
Al incluir las fresas en tus predilecciones culinarias también contribuirás a retardar el daño ocasionado a los riñones ya que tiene propiedades diuréticas. Como bien sabes, producto de la diabetes se desmejoran algunos órganos como los riñones, pulmones, entre otros. Pero esto se puede prevenir, cuidándose al extremo, mejorando nuestros hábitos alimenticios y asistiendo periódicamente a las citas con el especialista.
Las fresas combinan/acompañan cualquier plato
No existe plato alimenticio que desentone con las fresas y una de las principales preocupaciones de los diabéticos es precisamente que comer sin afectar tus niveles de azúcar en la sangre, teniendo eso presente no te de miedo de incluirlas a diario. Quizás su única desventaja, es que no contiene dentro de sus propiedades integrales ácidos omegas. Pero las fresas sin lugar a duda, son una excelente opción para cualquier paladar, por muy refinado que lo tengas.
Una taza de fresas a diario, puede ser la cantidad sugerida para un diabético en cualquiera de las etapas. Así que, anímate a degustarlas sin complicaciones. Con lo que debes tener cuidado, es la combinación con las cremas comunes pasteleras de elección casi que obligadas culturalmente.
Intenta esto, come tú las fresas y déjale la crema a tu pareja o simplemente comparte las que tienes en tu taza. En pareja los placeres son mejores y comer fresas es uno de ellos. ¡A disfrutar!
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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: agosto 24, 2017.