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En este artículo:

• Fibromialgia en adolescentes y niños: ¿Qué lo causa?
• Los síntomas de la fibromialgia en niños y adolescentes
• El tratamiento de la fibromialgia en adolescentes y niños

La fibromialgia puede ser difícil de detectar en los niños, porque es mucho más común en los adultos, especialmente afecta a las mujeres mayores de 18 años. Aun así, se cree que entre el 1% y el 7% de los niños padecen fibromialgia o condiciones similares.

La mialgia es parte de un grupo de enfermedades conocidas colectivamente como síndrome de dolor musculoesquelético. En los niños, la fibromialgia se denomina síndrome de fibromialgia primaria juvenil (SFPJ). Si un niño también tiene artritis u otra enfermedad relacionada con la fibromialgia, entonces se denomina síndrome de fibromialgia secundaria en menores.

Fibromialgia en adolescentes y niños: ¿Qué lo causa?

En realidad, nadie sabe qué causa la fibromialgia. La condición tiende a darse en familias, aunque hasta el momento no se ha descubierto un gen específico. Los investigadores han relacionado la fibromialgia a una serie de problemas de salud, incluyendo trastornos inmunológicos, endocrinos, psicológicos y bioquímicos.

Así como la fibromialgia en adultos es más probable que afecte a las mujeres, en los niños y adolescentes se produce con más frecuencia en las niñas. La mayoría de las niñas afectadas se diagnostican entre las edades de 13 y 15 años.

Los síntomas de la fibromialgia en niños y adolescentes

Uno de los principales síntomas de la fibromialgia infantil son los puntos de dolor y sensibilidad en los músculos. Estos puntos duelen cuando se aplica presión sobre ellos, por eso se llaman “puntos sensibles”.

Para encontrar estos puntos, los médicos deben presionar con su pulgar en 18 áreas clave que tienden a ser dolorosas en personas con fibromialgia. Los niños que tienen fibromialgia sienten sensibilidad en al menos cinco de estos puntos. Otro requisito para confirmar el diagnóstico es que haya experimentado dolores y molestias durante al menos tres meses.

El dolor puede empezar sólo en una parte del cuerpo, pero con el tiempo puede afectar a otras áreas. Los niños con fibromialgia han descrito el dolor de muchas maneras, incluyendo rigidez, opresión, dolor, sensibilidad y ardor.

Otros síntomas de la fibromialgia en los adolescentes y los niños incluyen:

• Fatiga
• Dificultad para dormir y despertarse cansado
• Ansiedad y depresión
• Dolor de estómago
• Dolores de cabeza
• Dificultad para recordar
• Mareo
• Piernas inquietas mientras duerme

Una de las razones por las que la fibromialgia en estas edades es tan frustrante es porque los síntomas se componen entre sí. Por ejemplo, el dolor de la fibromialgia hace que sea difícil conciliar el sueño. Cuando los niños no pueden dormir, se sienten más cansados ​​durante el día. Estar cansado hace que el dolor se sienta más grave. De esta forma, los síntomas crean un ciclo muy difícil de romper.

La fibromialgia puede ser tan debilitante que muchos niños deben faltar a la escuela un promedio de tres días cada mes. Tener esta condición puede ser socialmente aislante, los adolescentes con fibromialgia pueden tener problemas para hacer amigos y se sienten aislados debido a su enfermedad.

Si un médico sospecha de la fibromialgia, existe una prueba que puede ayudar a diagnosticar la condición. Esta prueba, llamada FM / a, identifica marcadores producidos por las células del sistema inmune en personas con fibromialgia.

El tratamiento de la fibromialgia en adolescentes y niños

El equipo de especialistas que tratan a un adolescente o niño con fibromialgia puede incluir:

• un reumatólogo pediátrico
• un psicólogo
• un fisioterapeuta

Aunque actualmente no hay cura para la fibromialgia en niños o adultos, están disponibles varios tratamientos eficaces para controlar sus síntomas, incluyendo:

Estrategias de afrontamiento. Una de las maneras más eficaces para tratar la fibromialgia en los adolescentes y los niños es el uso de estrategias de afrontamiento para manejar el dolor. Una técnica llamada terapia cognitivo-conductual ayuda a los niños con fibromialgia a reconocer y aprende sobre lo que desencadena su dolor y cómo deben lidiar con él. Es muy útil para mejorar la capacidad de funcionamiento y aliviar la depresión. Otros enfoques basados ​​en el comportamiento incluyen la relajación muscular y algunas técnicas para aliviar el estrés (respiración profunda, meditación).

Medicación. Los reumatólogos pueden recetar algunos de los medicamentos que normalmente se utilizan en pacientes adultos. Sin embargo, la seguridad y la eficacia de estos medicamentos no está tan estudiada en niños como en adultos.

Ejercicio. El ejercicio es una parte importante del tratamiento de la fibromialgia. Los niños que permanecen activos suelen tener menos dolor intenso y menos depresión. Un fisioterapeuta puede mostrar cuáles son los mejores ejercicios para la fibromialgia y puede enseñarles cómo seguir un programa de entrenamiento para que no se lesionen.

Terapia física. La fisioterapia y los masajes pueden aliviar el dolor muscular que experimentan los niños con fibromialgia.

Los adolescentes y niños que están padeciendo esta condición deben descansar lo suficiente, hacer ejercicios moderados, comer alimentos saludables y evitar el estrés. De esta forma podrán controlar los síntomas y mantener una mejor calidad de vida.

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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: julio 13, 2019.