Una de las afecciones médicas más dolorosas son probablemente, los cálculos renales. No te preocupes, pues cuentas con el jugo de limón y el aceite de oliva, la combinación perfecta para aliviar esta patología.
Se recomienda tomar esta mezcla para reducir el dolor y hacer que las piedras pasen desapercibidas y, ¡sin dudas es una gran solución!
¿Qué son los cálculos renales?
Llamamos cálculos renales a los agregados cristalinos de minerales que se encuentran presentes en la orina y que se forman internamente dentro de la vejiga y riñones causando gran dolor al pasarlos.
El dolor es el primer síntoma que evidencia que, efectivamente existen cálculos renales, y puede sentirse como: dolor debajo de las costillas o de la espalda, dolor al orinar, dolor en la parte baja del abdomen y de la ingle, orina turbia y con olor fuerte, el color puede variar de rojo a marrón, constantes deseos de orinar y náuseas.
Es importante someterse a una evaluación médica si estás experimentado dolor fuerte y sospechas de la presencia de cálculos renales, pues pueden existir otros problemas de salud que pueden simular cálculos renales. Lo más prudente es buscar orientación especializada. Ver: Remedios caseros para los cálculos renales.
Remedio casero para el tratamiento de los cálculos renales con zumo de limón y aceite de oliva
Debes mezclar dos onzas(cuatro cucharadas) de jugo de limón y dos onzas de aceite de oliva, debes beberlo todo. Seguidamente toma un vaso de agua. Este tratamiento natural lo puedes repetir de dos a tres veces al día o hasta que las piedras o cálculos hayan pasado. El proceso puede durar unos tres días.
¿Qué tipo de limón debo tomar para los cálculos renales?
Lo ideal es el jugo de limón recién exprimido. Pero si no tienes alternativa puedes utilizar jugo de limón embotellado, este ha sido también útil para muchas personas, en lo posible a penas consigas limones frescos puedes optar por exprimirlos y tener tu jugo natural.
¿Cuál es el tipo de aceite de oliva ideal para los cálculos renales?
Los poderes curativos del aceite de oliva son evidentes, en preferencia el prensado en frío y orgánico, sin embargo otros aceites de oliva han funcionado perfectamente para algunos pacientes durante mucho tiempo.
El indicado aquí es el aceite de oliva, así que no los sustituyas por ningún otro aceite. Ni el de coco, el cual es recomendable para la salud, pero no se recomienda su uso para la eliminación de cálculos renales.
Probablemente tomar dos cucharadas de aceite de coco en una sola toma provoque náuseas y vómitos, pero la misma dosis de aceite de oliva no ocasiona tales malestares. Los aceites hidrogenados por su parte no son adecuados para la curación de esta enfermedad.
¿Es necesario tomar el jugo de limón y el aceite de oliva con el estómago vacío?
Si quieres recibir todos los beneficios de esta natural mezcla lo ideal es tomarlo con el estómago vacío. Nunca uses este remedio casero luego de haber ingerido una comida pesada o con el estómago lleno. La efectividad de esta preparación no tendrá los mismos resultados si la tomas luego de haber comido, lo más probable es que experimentes vómitos.
Recomendaciones generales
- Lo más recomendable es consumir comidas livianas mientras usas el jugo de limón y el aceite de oliva.
- Basar tu alimentación principalmente en verduras y frutas te proporcionará los nutrientes y energía necesarios sin sobrecargar el sistema. Sin contar su aporte de hidratación del cuerpo cuando así lo requieres, ya que estos alimentos contienen gran porcentaje de agua.
- Incluir sal marina en tu dieta diaria ayuda a mantener el equilibrio del agua, así que lo debes recordar, puedes agregar una pizca de sal marina a un vaso de agua, de esta manera el agua extra que consumes no se eliminará.
- El aceite de oliva te proporciona grasa, por lo cual es prudente evitar los alimentos ricos en grasas mientras tomes este remedio. Las grasas adicionales podrían afectar la vesícula biliar.
- Te aconsejamos realizar actividad física liviana es decir, caminar a un mismo ritmo y si acelerarte. El ejercicio extenuante y la actividad que promueve la sudoración excesiva no es prudente realizar, solo hasta que hayan pasado las piedras.
- Descansar es fundamental, puedes ayudarte con medicamentos que te ayuden a aliviar el dolor, pero no descuides tu descanso. Ya que es importante para recobrar tu salud.
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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: mayo 27, 2019.